Ese es el nombre de la exposición permanente sobre la vida y obra del escritor Manuel de Pedrolo en el castillo de Concabella en la Segarra. El título de la misma explicita su relación con el concepto de límites y por extensión con la libertad.
Es un recorrido por su biografía, sus novelas, ensayos, poesías existencialistas y eróticas. Muestra sus métodos de trabajo, su compromiso político como cronista de su tiempo y sus problemas con la censura.
Pedrolo fue un autor prolífico y un personaje completo como hombre y como literato, los contenidos de la exposición son impresionantes por su extensión y por su profundidad. Pero entre todos ellos me gustaría compartir dos cosas, un fragmento de una de sus novelas “Avui es parla de mí” (Hoy se habla de mí) que me conmovió cuando la leí en la adolescencia por cómo trata el tema de la muerte:
[…] Què hi ha? Jo mancat de vida, jo sense amor ni dol, jo sense jo… No sé què pensar, no sé com pensar-ho. La meva absència. La terra mancada de mi… Però res no em necessita. Podria no haver viscut. Tot seguirà com cada dia…”
…”Qué hay? Yo falto de vida, yo sin amor ni duelo, yo sin yo…No sé qué pensar, no sé cómo pensarlo. Mi ausencia. La tierra sin mí…Pero nada me necesita. Podría no haber vivido. Todo seguirá como cada día…”
Y un pequeño poema que define a la perfección lo que es la libertad.
“Però jo he escollit aquest camí quan podía haver fet com tots els homes: limitar-me. Penso doncs en unes reixes a través de les quals el cel és blau i immens. I això es cert encara que siguin, també, certes les reixes.”
Pero yo he escogido este camino cuando podría haber hecho como todos los hombres: limitarme. Pienso pues en unas rejas a través de las cuales el cielo es azul e inmenso. Y eso es cierto aunque sean, también, ciertas las rejas.

